CERO TOLERANCIA CONTRA LA CORRUPCIÓN. NDLeón
CERO TOLERANCIA CONTRA LA CORRUPCIÓN
"Todo tiene su final, nada dura para siempre, tenemos que recordar que no existe eternidad" Héctor Lavoe
Estamos terminando con una efervescente marea estas reñidas elecciones; el cambio, la esperanza contra el modelo reaccionario statu quo, con leguleyadas e impugnaciones de parte de los seudos democráticos. Por lo tanto me doy la libertad de comunicar a mis amigos, familiares, conocidos y vecinos, que voté por Perú Libre y yo no soy comunista, ni socialista, soy libre pensador, profesional en la actuación, dirección de teatro y escritor. Algunos conciudadanos me llaman Señor Actor, vate, otros poeta y los más íntimos, a secas, Artista. Me gano la vida sembrando y cosechando arte, compartiendo el borderó después de cada función; repartiendo el tanto por ciento de las ventas de libros, recitales o encuentros culturales. He viajado por nuestro suelo patrio, he visto las injusticias, el abandono, maltrato, la desidia, la corrupción de nuestros gobernantes. Cada nuevo presidente un nuevo millonario, a su alrededor nuevos ricachos sicarios. Pedantes, soberbios, como si la hubieran sudado para vivir como jeques. Estos piratas, ladrones de cuellos blancos, socios del Club de la Construcción, son los dueños de los diarios, revistas y periódicos, almacenes, fábricas, universidades, almacenes, grandes bufetes y negocios. Venden el oro y el moro, la patria, la coca, los cerros y hasta el mar. Nadie les puede decir algo, pues lo tachan de terrorista, te detienen, te enmarrocan, terminas en la sombra de un tétrico calabozo, sin ayuda y sin abogados. Sus tristes aliados, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, muy ajenos a su pueblo, extorsionan, maltratan lo que juraron defender. Sí señores, Vote por el Lápiz del Partido Político Nacional Perú Libre (PL), no voté por Pedro Castillo, voté por la esperanza, por el cambio, por el final de la eterna corrupción. Espero una ley tipo Singapur para conmemorar el Bicentenario de nuestra republiqueta de utilería . En 1824, Simón Bolívar decretó pena de muerte para los corruptos. Dice así:
—Artículo 1° Todo funcionario público, a quien se le convenciere en juicio sumario de haber malversado o tomado para sí de los fondos públicos de diez pesos arriba, queda sujeto a la pena capital. —Artículo 2° Los jueces a quienes, según la ley, compete este juicio, que en su caso no procedieren conforme a este decreto, serán condenados a la misma pena —.
Pero la corrupción ladina tachó la ley e ipso facto empezaron a roer el erario nacional.
Necesitamos a grito pelado una ley Singapur “Muerte al corrupto”. En Singapur la clave del éxito está ligada a su crecimiento económico y a su política de "cero tolerancia contra la corrupción". Aquellos que incurren en actos corruptos son castigados con la pena de muerte. Lee Kuan Yew, Primer Ministro de Singapur, dijo: —"Si quieres derrotar la corrupción, debes estar preparado para enviar a la cárcel a tus amigos y familiares" —.
Así sea. Amén,
NICOLÁS DANIEL LEÓN CADENILLAS
Lima, junio, 2021.
No hay comentarios:
Publicar un comentario