Señora Pilar, DEP. NDLeón.
Después de leer varios nostálgicos comentarios sobre la señora Pilar.
También quise escribir mi comentario pero me quedé en blanco. Quieto y en
silencio recordé mi niñez como muchos de nosotros que ahora estamos recordando
pasajes que rememoran nuestra infancia, cuando niños comprando los variados
jugos de la buena señora Pilar.
Allá por los ídos años sesenta, mi papá vendía papel periódico blanco (papel
de despacho) a los ambulantes agrupados en carretillas, triciclos, cajones y
cajas de frutas en un pampón de la avenida Palermo. El mercadillo más que
mercado parecía feria de pueblito.
Me acuerdo de la carreta del señor de las yuquitas, recuerdo que me
despachaba las ricas yuquitas calentitas en bolsitas hechas con el mismo papel
que mi papá le vendía. Por esos tiempos no existía las bolsas de plástico.
En la Avenida Palermo un señor alquilaba un caballo y un burro para un breve
paseo que consistía una vuelta del Parque Unión Panamericana hasta la Avenida
Cánada.
Y llegó el día que todos los ambulantes aparecieron en medio de la
avenida Palermo. Sorprendiendo y “usurpando” el área de juego de los niños y
jóvenes de la zona. Los comerciantes ambulantes con trabajo, ahorros y tesón
habían dado un gran paso comercial; unidos compraron el terreno. Primero se
unieron como Grupo, después como Asociación y finalmente terminaron en Cooperativa
(porque estas no pagaban impuestos).
En 1965 se Inauguró el Mercado Cooperativo Balconcillo, a partir de esa
fecha recuerdo muy bien el puesto de la Señora del Jugo, a la buena señora
Pilar, conocida como “La Tía Sonrisas” por todos los niñitos del Mercado.
Mi mamá fue amiga de la señora Pilar; mi hermanita Viky y mi hermanito
Yuri, recuerdan desde niñitos a la señora Pilar, recuerdan el sabor tan exquisito
de sus jugos; de su amabilidad y amorosa sonrisa con sus clientes. Viky a sus
cuatro años de edad era cliente asidua, al igual que Yuri, pues ambos
estudiaron en el Colegio Cristo Milagroso del pasaje junto al Mercado. Por lo
tanto tomaban sus respectivos jugos todos los días.
Mis padres, nosotros los hijos, nuestros hijos y nietos, hemos gozado,
saboreado, alimentado con los ricos jugos de la señora Pilar. Ejemplo de madre
y amiga, de trabajo y respeto, de compañera y buena esposa. Don Artemio y Doña
Pilar fueron ejemplos de familia, unión y compañerismo en el Mercado
Cooperativo Balconcillo de la Avenida Palermo.
Que Dios
los Guarde en su Gloria.
Nicolás D. León Cadenillas.
Lima, Agosto 2014.
1 comentario:
es el mejor jugo de balconcillo sin tanta mezcla solo piña platano y papaya y listo riquisimo y su especial lo maximo
Publicar un comentario